--Tomás Quintero es un psicólogo que vive en Maracaibo. Accedió a publicar esta historia con la que de seguro más de un lector se sentirá identificado (y quizás hasta acostumbrado). Aún cuando no guarda ninguna relación con el tema periodístico ni mucho menos con la sección Lo Hice YO de este blog, vale intentar darle un espacio para que quien lo lea pueda tomar medidas preventivas (o correctivas) a partir de su caso.
Por Tomás Quintero*
Miro los teléfonos que tengo en mi mano. Levanto la mirada y observo a través del vidrio del carro: tres hombres jóvenes caminan hacia el estacionamiento de PIPO (establecimiento de comida rápida) de la avenida Universidad. El hombre del centro me parece conocido. Miro su rostro y trato de adivinar dónde lo he visto antes. Luego echo un vistazo a su cintura, noto que debajo de su franela roja se esconde un pequeño bulto. Pienso: "coño, me van a atracar".
Siguen caminando los tres hombres y se acercan a Juan (un conocido que iba con él) que se encuentra cerca del mostrador. El hombre de rojo saca de su jean el "bulto": un revolver plateado que en poco tiempo apuntaba a Juan. Tres hombres comienzan a gritar pero no alcanzo a entender lo que dicen. Miro mis celulares y pienso: "¿Qué hago con ellos?, ¿los escondo? Si los escondo en el carro igual se lo quedan". Me miran, los miro y mientras levanto los brazos con calma, se acerca el hombre armado y trata de abrir mi puerta... se traba, tiene el seguro puesto. Lo quito rápidamente y abro pero aún me detiene el cinturón de seguridad. El maleante me dice: "apurate que no tengo todo el día". En mi mente transcurren dos minutos y medio mientras trato de zafar el cinturón (realmente pasaron 0,003 segundos), bajo del carro y los atracadores comienzan a abordarlo.
El joven armado me mira y me dice: "la cartera", mientras que pensaba "coño la cédula, ¿y si le pido que me deje la cédula nada más? no, quizá se altere". Con calma saco mi cartera y se la entrego. Los amables sujetos entran al auto mientras camino hacia el mostrador acompañando a Juan, y cuando le dimos la espalda al auto, pensaba "¿y si nos disparan por la espalda?”. Transcurren 2 minutos 17 segundos en mi mente (realmente fueron 0,07 segundos). “Ufff, no me dispararon”, me decía mientras el carro doblaba en la esquina a toda velocidad. Miro a Juan, aún atónito y pienso: "Me atracaron". Así viví mi primer atraco.
--Caso “Facebook”: entiéndase como la serie de eventos que finalizó con el despido del docente César Pérez (mediante la no renovación de su ayudantía académica) luego de tomar, publicar y expresarse sobre un comentario en el perfil de la famosa red social perteneciente a una profesora y ex directora de la Escuela de Comunicación Social de LUZ. Entendido lo más elemental, falta pasar a lo inconcluso, a lo incierto: la ambigüedad, la falta de aclaratoria y de datos certeros en la decisión tomada por el Consejo de Facultad de Humanidades y Educación de la Universidad del Zulia (LUZ) y firmada por la Decana.
De hecho, luego de estos sucesos, aún con todo el ruido que se ha producido de manera interna, no ha habido información oficial por parte de la Dirección de Escuela ni mucho menos un comunicado por parte del dichoso poder legislativo hacía la comunidad universitaria donde se expongan los reales motivos del dictamen.
Es en parte ese planteamiento lo que encontramos tanto en la carta abierta de Cesar Pérez como en la de Johandry Hernández (estudiante de posgrado en las mismas condiciones que Pérez ante la solicitud firmada por la directora de la Escuela). Pueden ustedes mismos revisarlas, juzgar y hasta comentar.
El video sobre estas líneas muestra un coletazo, un evento a posteriori de otro más grande y quizás uno de los más denigrante en la historia de la Escuela de Comunicación Social de la Universidad del Zulia (LUZ), o por lo menos, uno que formará parte de este capítulo donde se ha escupido a todos aquellos documentos sobre expresión que casualmente no hace mucho se mencionaron en este blog.
Como no se puede comenzar si un principio, toca comentar el inicio de esta serie de sucesos que tuvo como clímax el despido del docente Cesar Pérez (mediante la cancelación inmediata de su ayudantía académica) y que concluyó con el futuro incierto de varios estudiantes de la cátedra Morfosintaxis del Castellano.
Resulta ser que el personaje en cuestión tomó una captura de una conversación en el Facebook donde una profesora y ex directora de la Escuela (que denominaremos “Batichica” por si entre sus actividades extracurriculares se le ocurre cargar también contra este blog) ventila una serie de presuntas irregularidades que ocurren en la actual Dirección General de Comunicación (DGC) y por la que, según ella, sus estudiantes no pueden hacer sus pasantías en ningún medio de la misma universidad en la que estudian, es decir, LUZ.
“¿Y es esta la gente que dirige nuestra Escuela de Comunicación Social de LUZ? Qué lamentable la desinformación en la que andan, pero desde la DGC hemos impulsado algunos aspectos claves en la comunicación institucional y en el manejo de un discurso coherente y plural, cosa complicada de entenderpara muchos “gerentes” de hoy. Una Escuela que no permite a sus estudiantes hacer pasantías en sus propios espacios y dependencias sólo por diferencias “políticas”. Nuestros estudiantes no deberían pagar por los errores y frustraciones de otros”, fue el comentario que dejó Cesar en esa captura llevada a su propia cuenta y que trajo consigo una “sorpresiva” convocatoria del Consejo de Escuela y luego de Facultad impulsado por la Liga de la Justicia -que apoya y se lleva bien con la arquitectura mental de Batichica- desembocando en la no renovación del cargo, perjudicando así de manera automática el calendario de clases de una decena de estudiantes.
La protesta que se muestra en el video es un vago intento de explicar que Cesar es sólo el perjudicado cuando los estudiantes quedan en el limbo académico en un periodo que tiene tantas fechas feriadas como suspensiones de los gremios docentes y que otros profesores del departamento de Periodismo impreso DEBEN (nótese la mayúscula impuesta por estas autoridades) tomar las secciones del despedido aún cuando sus cargas académicas desde hace varios atardeceres estánexcedidas.
¿Qué es lo más triste de todo? Que esa Liga de la Justicia, la misma que ha propiciado el declive de nuestra escuela, que en parte estaba involucrada en la propia Dirección General de Comunicaciones (el verdadero trasfondo de este “ajusticiamiento”) y que se involucran con el gremio periodístico regional (siendo en su mayoría de Publicidad y Relaciones Públicas) ha sido partícipe de numerosas protestas contra actos represivos por parte del Gobierno Nacional y que “nuestro” centro de estudiantes, que fueron identificados por cierto medio regional como “futuros periodistas” cuando la mayoría de ellos al igual que nuestra dirección de escuela son del área de Relaciones Públicas (y que en el actual pensum de estudio no ven NINGUNA materia sobre periodismo) armaba un mediático pronunciamiento la misma semana que los estudiantes -que dicen representar y defender- quedaron a la deriva por esta tempestiva decisión.
Probablemente saldrá alguien diciendo que Cesar hizo mal en tomar esa conversación de la cuenta de Facebook de Batichica y publicarlo de esa manera. Yo mismo lo hice. La persona que se haga ese planteamiento tiene toda la razón porque no era el lugar más idóneo para un debate de ese tipo y quizás hasta se merecía una sanción. Pero aquí lo que vemos es un uso indiscriminado del poder aún cuando él ofreció argumentos y en ningún momento dejó de ser cuidadoso con sus palabras hacia esa persona. Peor aún es que el motivo para el despido sea expresarse justamente en una escuela que está formando (según dicen) Comunicadores Sociales.
No me aventuro a entrar en detalles sobre el polémico intercambio de frases. Me basta con que un dinosaurio excesivamente perfumado del séquito me incrimine como el encargado de la protesta en el video inicial cuando poco sabía de ella. Pero alguien sí lo hizo a través de un comunicado donde se expresa al respecto y que envió a este espacio.Lo encontrarán de primero en los próximos vínculos esperando que aclare el juicio a más de un lector y pidiendo al santo del día para que ninguno termine con el mismo destino de Cesar.
Por cierto, el video fue puesto en Vimeo y no en Youtube porque el segundo servicio está BLOQUEADO para su uso dentro de la Universidad del Zulia. Otra muestra de que en nuestra casa de estudios todavía hay quien ve como una amenaza el uso de las herramientas 2.0
--He aquí una información de interés para aquellos estudiantes de nuestra escuela (de Relaciones Públicas, Impreso o Audiovisual) que inscriban 0 materias el primer periodo de 2010: un grupo está organizando todas las actividades pro-graduación que incluye misa, acto de imposición de anillos y medallas más una caravana con rumba posterior.
Para los que decidan anotarse, aún tienen tiempo de hacerlo, llenando en primer lugar un formulario que se encuentra en su página Web y uniéndose a su grupo de Facebook (que aunque mencionen sólo Audiovisual e Impreso, es válido TAMBIÉN para RRPP).
El equipo de La Ruta llegó rodando a la presentación formal del calendario 2010 de la Asociación para la Defensa y Protección de los animales (ASODEPA).
La presidenta de la fundación, Doris Rubio, conversó con estos muchachos de La Ruta y dijo que este año se inspiraron en la creación de la campaña “Listón Verde” con la intención de dejar un mensaje que incentive al amor por los animales.
En este calendario, explicó Rubio, se podrán encontrar los derechos universales decretados por la ONU y UNESCO para la defensa de los animales.
Los fondos recabados con la venta del calendario serán destinados a la manutención del refugio, comida, medicamentos y mejoras a la infraestructura de la granja que poseen para cuidar a los animales.
Los invitamos a que compren su calendario ASODEPA 2010 que estará a la venta en tienda El Tacón de la Av. 15 Delicias de Maracaibo y a través de su página Web. El próximo proyecto es una exposición de arte con obras donadas a la fundación y un Expo Mascota donde podrán reunirse todas las tiendas, empresas e instituciones que trabajen con los animales.
Como parte de las actividades del cierre de año se estará realizando una venta de garaje el primer fin de semana del mes de diciembre. Para mayor información o donaciones visiten el sitio en Internet.
Nota: Al parecer su Web está caída. Mientras solucionan el problema, pueden conseguir más información en su Myspace o ensu cuenta de Facebook.
*Productora y locutora del programa La Ruta de LUZ radio (que pueden escuchar de lunes a viernes de 8 a 10 de la mañana).
--Antes de destapar cualquier perfume con esencia de rumor, suposiciones y predicciones, vale tocar primero el terreno de lo conocido, de las noticias certeras y confirmadas: la Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela (Fapuv) convocó a un paro para el próximo miércoles 11 de noviembre para exigir al Ministerio de Educación Superior (Mppes por sus siglas “revolucionarias”) el pago sin discriminaciones correspondiente a la homologación 2008/2009. Está previsto que, de no conseguir el éxito en la misión de este día, a la suspensión de actividades se le sumarían dos nuevas fechas: jueves 19y martes 24 (que a su vez tendría como día feriado el miércoles 18 en el Zulia por el día de La Chinita).
Entendido esto vale pasar al caso de la Universidad del Zulia donde el gremio regional de profesores (Apuz) se manifestó de una particular manera en su cartelera publicada el pasado domingo en el diario La Verdad. En la convocatoria anuncian que la FAPUV llamó al paro y sutilmente “invitan” a los docentes a participar, aunque no dejan claro si se integran de manera activa. En otras palabras, fueron simples pájaros mensajeros del buitre mayor sin establecer su posición.
Se puede deducir entonces dos escenarios: no tuvieron espacio en la cartelera para expresarse como es debido o simplemente desean evitar ensuciarse con la vapuleada comunidad universitaria que acaba de atravesar (y hasta reprochar) sendas suspensiones de actividades, pero tampoco quieren quedar faltos de solidaridad con el grupo de gremios del que tanto apoyo obtienen.
Viene la pregunta: damas y caballeros de la Apuz¿apoyan con todas las de la ley o no el paro nacional convocado por la Fapuv? Porque de ser afirmativa la respuesta, la comunidad estudiantil necesita (o más bien, necesitamos) mucho más que un escueto y ambiguo comunicado que deja a libre interpretación sus intenciones, que vale decir, nos han jodido perjudicado buena parte de las actividades de este año y amenaza con hacerlo en las próximas semanas.
La idea no es recriminar la protesta. En una Venezuela donde hay dinero par entregar de manera “solidaria” a varios puntos del globo terráqueo se debería considerar de manera íntegra el pago a los profesores universitarios. Aquí lo que se acusa es de la falta de ingenio al elegir el camino más cómodo y “saludable” para exigir lo que corresponde, perjudicando en ese sendero a los estudiantes.
Entendido esto, vale reiterar la pregunta a la Apuz: ¿Esperamos un comunicado explicando con mayor detalle esta situación o comenzamos a armar la protesta en contra de su protesta?
--5. Se elaboró un cronograma de lucha hasta la última semana del mes de noviembre, de obligatorio cumplimiento para todas nuestras asociaciones y agremiados, en el que destacan las siguientes actividades:
5.1. PARO NACIONAL DE UNIVERSIDADES de 24 horas el día miércoles 11 de noviembre con visita masiva de todas las universidades al MPPES, para entregar al Ministro Acuña documento de ratificación de nuestras exigencias
5.2. PARO NACIONAL DE UNIVERSIDADES de 24 horas el día jueves 19 de noviembre con jornadas regionales de volanteo en sitios estratégicos de las distintas ciudades por parte de cada una de las asociaciones adscritas a la Federación
5.3. PARO NACIONAL DE UNIVERSIDADES de 24 horas el día martes 24 de noviembre con protesta a las puertas de la OPSU en la ciudad de Caracas, y a definir por las asociaciones, en las regiones.
Miro los teléfonos que tengo en mi mano. Levanto la mirada y observo a través del vidrio del carro: tres hombres jóvenes caminan hacia el estacionamiento de PIPO (establecimiento de comida rápida) de la avenida Universidad. El hombre del centro me parece conocido. Miro su rostro y trato de adivinar dónde lo he visto antes. Luego echo un vistazo a su cintura, noto que debajo de su franela roja se esconde un pequeño bulto. Pienso: "coño, me van a atracar".
